La asociación exige una auditoría urgente, la instalación de sistemas de emergencia y planes de contingencia tras el colapso operativo sufrido durante el apagón

Madrid, 27 de mayo de 2025 – JUCIL ha denunciado la falta de previsión y de recursos que afectó al servicio esencial que presta el cuerpo durante el peor apagón eléctrico de la historia reciente de España, ocurrido el pasado 28 de abril.

“El apagón puso de manifiesto carencias inaceptables en los recursos técnicos y de respaldo de la Guardia Civil, dejando a nuestros agentes incomunicados, sin iluminación y sin capacidad para atender al ciudadano en un momento crítico. Muchas unidades se quedaron a oscuras y sin posibilidad de dar servicio mínimo”, explicaba Ernesto Vilariño, Secretario General de JUCIL.

Según denunció JUCIL, la falta de comunicación se debió a la dependencia de baterías en los terminales portátiles SIRDE, cuya autonomía se agotó durante la crisis y que no pudieron recargarse por la falta de suministro. Además, en los cuarteles y puestos ordinarios no existía alumbrado de emergencia ni sistemas de alimentación eléctrica alternativos, lo que provocó la parálisis de servicios esenciales como la atención ciudadana, la seguridad perimetral o los sistemas de refrigeración en centros críticos como los ACUDA.

Ante esta situación, JUCIL ha solicitado formalmente al Ministerio del Interior una auditoría técnica urgente para identificar qué unidades carecen de estos sistemas, la dotación de grupos electrógenos y alumbrado de emergencia en todos los edificios operativos, así como la modificación de los sistemas de carga en vehículos para garantizar la autonomía de los terminales SIRDE. Asimismo, la asociación reclama la elaboración y actualización de planes de contingencia específicos por comandancia, que garanticen la operatividad de la Guardia Civil incluso en escenarios de corte total o parcial de suministros críticos.

“No podemos permitir que un apagón vuelva a dejarnos inoperativos como sucedió el 28 de abril. Exigimos que se dote de los medios necesarios para que nuestros agentes puedan seguir garantizando la seguridad y el orden público, incluso en las peores circunstancias”, finalizaba Vilariño.