
JUCIL denuncia ante la Dirección General la falta de dotación básica en el Servicio Marítimo
La asociación traslada una carta de un guardia civil destinada en SEMAR que evidencia la precariedad material con la que prestan servicio numerosos agentes
Madrid, 3 de junio de 2025 – JUCIL ha registrado ante la Dirección General de la Guardia Civil una carta remitida por un guardia civil destinado en el Servicio Marítimo (SEMAR), en la que se detalla la grave carencia de medios personales y materiales con la que muchos agentes se ven obligados a desarrollar su labor diaria.
En la carta, el agente describe con claridad y dureza cómo, a día de hoy, carece de uniformidad adecuada y de materiales básicos como zapatos antideslizantes, trajes de flotabilidad o chalecos de protección. Su equipamiento actual, según denuncia, procede de la donación de compañeros jubilados o destinados a otras especialidades. “Es triste que en la Guardia Civil deba heredar zapatos usados para poder trabajar”, afirma.
La misiva también pone el foco en la falta de seguridad real en caso de caída al mar. Los uniformes no cuentan con flotabilidad, el calzado no incorpora sistemas de liberación rápida y no existen sistemas de localización individual por GPS. A juicio del agente, estas carencias suponen un riesgo inasumible en un entorno hostil como el marítimo, especialmente frente a organizaciones delictivas que operan con tecnología y medios superiores.
El escrito, trasladado por JUCIL respetando el anonimato del firmante, reitera las mismas deficiencias que esta asociación lleva denunciando en reiteradas ocasiones: ausencia de dotaciones individualizadas, falta de tallaje, materiales reutilizados y medios obsoletos.
JUCIL considera inaceptable que a día de hoy haya agentes del Servicio Marítimo que deban vestir con monos de hace 25 años o prestar servicio sin los equipos mínimos de seguridad. La asociación ha reclamado una solución inmediata y recuerda que esta situación compromete no solo la dignidad profesional de los guardias civiles, sino también su integridad física.
