Las plazas anunciadas son insuficientes para cubrir las miles de vacantes existentes en la actualidad

Madrid, 30 de septiembre de 2024 – JUCIL ha solicitado al Gobierno que abandone su propuesta de implementar agentes virtuales mediante tótems interactivos en zonas rurales y, en su lugar, se enfoque en aumentar significativamente la oferta de plazas para efectivos en todo el territorio.

La asociación advierte que la falta de personal en numerosas zonas rurales contribuye al progresivo abandono de estas áreas, afectando gravemente la seguridad y el bienestar de los residentes fuera de los núcleos urbanos.

Las recientes convocatorias para el acceso a los cuerpos de seguridad suponen una leve mejora respecto a años anteriores, con un incremento en el número de plazas disponibles. Sin embargo, desde JUCIL se recalca que estas medidas, aunque positivas, son insuficientes para cubrir las miles de vacantes existentes en la actualidad.

“Es alentador ver un aumento en las plazas, pero se necesita una respuesta más contundente por parte del Gobierno. Estas cifras resultan insuficientes para cubrir las más de 17.000 vacantes que existen en la Guardia Civil. La seguridad en áreas rurales no puede depender de cifras tan ajustadas. Es fundamental reforzar la presencia de efectivos en todas las zonas del país”, explicaba Ernesto Vilariño, Secretario General de JUCIL.

Hace un año, el Gobierno anunció un plan para instalar avatares virtuales en zonas rurales, con el fin de suplir la falta de personal en estas áreas. Sin embargo, este proyecto, duramente criticado por JUCIL desde su inicio, está hoy en entredicho. La empresa adjudicataria se enfrenta a graves problemas financieros, lo que pone en riesgo su viabilidad.

“El proyecto que calificamos desde el principio como inadecuado ha demostrado ser un absoluto fracaso. No solo no ha resuelto la creciente inseguridad en áreas rurales, sino que el presupuesto destinado a esta iniciativa corre el riesgo de perderse mientras las instalaciones rurales siguen sin personal suficiente. La presencia humana no puede ser reemplazada por un avatar digital”, subrayaba Vilariño.

Además, desde JUCIL se denuncia la existencia de cuarteles vacíos en áreas rurales, donde muchas instalaciones permanecen cerradas o abren solo algunas horas al día, dejando a los ciudadanos sin el respaldo necesario.

“El cierre de instalaciones condena a los habitantes de estas zonas a vivir prácticamente desprotegidos. En lugar de invertir en soluciones tecnológicas, se debe priorizar la presencia física de los cuerpos de seguridad, especialmente en momentos de emergencia”, explicaba Vilariño.

Desde JUCIL se propone reorganizar los acuartelamientos y dotar de más recursos a las instalaciones rurales, asegurando una atención continua y cercana. Además, se insiste en la necesidad de priorizar la seguridad en áreas rurales, garantizando que los ciudadanos que residen en estas zonas reciban la misma protección que los habitantes de los grandes núcleos urbanos.

“El Gobierno debe centrarse en soluciones reales para reforzar la seguridad en todo el territorio. La presencia física de los cuerpos de seguridad es insustituible, y sin una acción inmediata, miles de ciudadanos quedarán desprotegidos”, finalizaba Vilariño.