La Asociación reclama protocolos específicos, reducción de operativos en temperaturas extremas y ropa adecuada para garantizar la salud y seguridad de los agentes

Madrid, 23 de enero de 2025 – JUCIL ha elevado una solicitud formal al Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de la Guardia Civil con el objetivo de implementar medidas urgentes que protejan la salud de los agentes durante los operativos realizados en condiciones de frío extremo, especialmente en horarios nocturnos o en zonas donde las temperaturas son especialmente bajas.

Para JUCIL las actuales condiciones a las que se enfrentan los guardias civiles suponen un riesgo laboral.

“En numerosos dispositivos de verificación, el personal de seguridad ciudadana y de la agrupación de tráfico trabaja bajo temperaturas extremadamente bajas, sin que se apliquen directrices claras para mitigar los riesgos asociados a estas condiciones. Esto no solo afecta a su salud, sino también a la realización del propio servicio”, explicaba Melisa Carmona, Secretaria Nacional de Riesgos Laborales de JUCIL.

Desde JUCIL se subraya que la normativa en materia de prevención de riesgos laborales obliga tanto a los mandos como a la Administración a proteger a los trabajadores frente a este tipo de situaciones.

La asociación ha recordado que en diversas comandancias ya existen medidas similares para el verano, cuando las temperaturas alcanzan valores extremos, lo que demuestra que es posible adaptar los operativos sin comprometer la seguridad ciudadana.

“Se han dado órdenes para minimizar los puntos de identificación durante las horas de mayor calor, y creemos que el mismo criterio debería aplicarse en invierno, cuando las temperaturas son igualmente peligrosas. No hablamos de prohibir los operativos, sino de adaptarlos para evitar consecuencias negativas en la salud de los agentes”, comentaba Carmona.

JUCIL ha alertado de que los riesgos asociados a estas condiciones incluyen problemas cardiovasculares, lesiones por congelación, hipotermia y trastornos musculoesqueléticos, que afectan directamente a la movilidad, la destreza física y mental de los agentes. Por este motivo, JUCIL solicita que se reduzcan al mínimo los operativos en situaciones de frío extremo y que se establezcan directrices claras para organizar el trabajo de forma adecuada en estas circunstancias. Además, considera imprescindible la elaboración de un protocolo específico para operativos en bajas temperaturas, así como la dotación de ropa de protección térmica suficiente y adecuada para las condiciones climáticas.

“No podemos permitir que estas condiciones de frío extremo afecten de manera tan adversa a quienes velan por nuestra seguridad. Es obligación de la Administración actuar para garantizar su bienestar y evitar riesgos innecesarios”, finalizaba Carmona.