JUCIL se reúne con el coronel jefe de la comandancia de Castellón para abordar la situación de los cuarteles de Almazora y Burriana
La asociación destaca la necesidad urgente de más recursos y la mejora de las infraestructura
Castellón, 20 de noviembre de 2024 – JUCIL ha mantenido un encuentro con el coronel jefe de la comandancia de Castellón para abordar las problemáticas que enfrentan los cuarteles de la provincia, haciendo especial énfasis en los de Almazora y Burriana. Durante la reunión, se puso de manifiesto la insuficiencia de efectivos y las condiciones deficientes de los acuartelamientos, lo que compromete la capacidad de los agentes para prestar un servicio adecuado.
“El puesto de Almazora es un edificio decadente y en mal estado. El coronel nos ha informado de que está prevista la demolición del viejo acuartelamiento para el verano de 2025, y que, si todo marcha según lo planeado, un nuevo cuartel debería estar listo para el verano de 2027”, explicaba David González, Secretario Nacional de Formación y Especialidades de JUCIL.
En cuanto al cuartel de Burriana, la situación no es menos preocupante. Aunque actualmente se están llevando a cabo reformas, JUCIL ha expresado su escepticismo sobre la inversión realizada.
“Se están invirtiendo más de 2,8 millones de euros en la renovación de un edificio muy antiguo. La lógica habría sido construir un cuartel nuevo, moderno y adaptado a las necesidades actuales”, comentaba González.
Además, JUCIL ha transmitido su inquietud por el ritmo de las obras, que deberían haber concluido hace tiempo, y por los acabados defectuosos de los pabellones ya habitados.
“Tras las obras realizadas, han dejado ventanas mal aisladas. No han terminado correctamente la obra, por lo que entra frio y humedad, y esto afecta las condiciones de habitabilidad”, denunciaba González.
En cuanto al sistema de climatización, JUCIL trasladó en la reunión el hecho de que las dependencias oficiales se han visto afectadas por la falta de aire acondicionado, lo que este verano pasado llevó a que los agentes trabajasen con temperaturas muy superiores a las recomendadas. “En un caso, una persona que estaba presentando una denuncia sufrió un golpe de calor, que gracias a la rápida intervención de los agentes quedó en un susto”, explicaba González.
Por último, JUCIL denunció el fallo estructural en la implementación de las nuevas instalaciones eléctricas, ya que no se consideró inicialmente la necesidad de una mayor intensidad de electricidad y ahora se debe realizar una nueva acometida.
“En esta reunión hemos solicitado realizar un seguimiento más riguroso de estas obras y la garantía de que se adopten medidas para evitar que los agentes y ciudadanos continúen enfrentando estas condiciones adversas”, finalizaba González.