Las asociaciones se preguntan si este es el inicio del desmantelamiento de la Guardia Civil en Canarias, al igual que está ocurriendo en País Vasco, Navarra y Cataluña

Santa Cruz de Tenerife, 10 de febrero de 2025 – Las asociaciones profesionales de la Guardia Civil en Canarias han manifestado su “total y absoluta disconformidad con la disolución del Grupo de Reserva y Seguridad Nº8 de Canarias”, una unidad clave en la protección y mantenimiento del orden en el archipiélago.

Según informaciones recientes, la Jefatura de Unidades de Especialidades y Reserva (JUER) habría decidido eliminar esta unidad en el archipiélago, y la decisión ya habría sido aceptada de manera irrevocable en los órganos centrales de la Guardia Civil en Madrid.

Esta medida, adoptada sin una justificación objetiva aparente, ha alertado a JUCIL y al resto de asociaciones profesionales de la Guardia Civiles, ya que “no contar con esta Unidad especializada en la única región ultraperiférica española reconocida por la Unión Europea” supondría un grave perjuicio para la seguridad de los ciudadanos canarios.

El GRS Nº8 desempeña funciones críticas para la seguridad pública, incluyendo el control de grandes concentraciones y manifestaciones, el mantenimiento y restablecimiento del orden público, y la respuesta ante amenazas NRBQ. En este sentido, las asociaciones recuerdan que “todos sus miembros poseen la titulación necesaria y la Unidad cuenta con medios individuales y colectivos para hacer frente en primera instancia a los incidentes, accidentes y actos delictivos con riesgo nuclear, radiológico, bacteriológico y químico con riesgo para personas y bienes”.

Además, el comunicado recalca que este grupo ha sido clave en “la colaboración en materia de Protección Civil, en particular en casos de grave riesgo, catástrofe o calamidad pública, como los grandes incendios acaecidos en Canarias, crisis vulcanológicas en las islas de El Hierro y La Palma; búsqueda de desaparecidos; actuar y neutralizar amenazas terroristas, entre otros servicios esenciales de seguridad especializados, como la lucha contra organizaciones criminales”.

Las asociaciones profesionales alertan de que “España se encuentra en nivel 4 antiterrorista, y que Canarias es sin duda una puerta de entrada de este tipo de delincuencia, más aún con la llegada masiva de inmigración ilegal a nuestras costas”. En este sentido, JUCIL y el resto de asociaciones advierten que la desaparición del GRS Nº8 también tendrá un “grave impacto en el control de la inmigración en Canarias, una región que enfrenta una creciente presión migratoria”, así como en la seguridad de infraestructuras críticas susceptibles de atentados, como puertos, aeropuertos y centrales energéticas.

Además, denuncian que “la planificación de la disolución se ha llevado con el mayor secreto, sin que los propios afectados a fecha del presente tengan conocimiento por medios oficiales”. También lamentan que esta medida se adopte en un contexto en el que la falta de efectivos en el Cuerpo en Canarias es alarmante.

Ante esta situación, las asociaciones profesionales de la Guardia Civil denuncian la falta de consideración hacia la seguridad de los ciudadanos canarios, así como la insensibilidad ante la situación de los agentes y sus familias.

Por ello, exigen en el comunicado conjunto la “revisión inmediata de esta decisión y la adopción de medidas que permitan la continuidad del GRS Nº8 en Canarias, garantizando la seguridad de sus ciudadanos y el bienestar de los agentes destinados en la región”.

Finalmente, las asociaciones se preguntan “si este es el inicio del desmantelamiento de la Guardia Civil en Canarias, al igual que está ocurriendo en País Vasco, Navarra y Cataluña, y cuáles serán las próximas unidades que van a suprimir”, mostrando su preocupación por el futuro de la Guardia Civil y de la seguridad en el archipiélago y en el resto del territorio nacional.