• La asociación mayoritaria de la Guardia Civil denuncia la falta de infraestructuras adecuadas en la segunda ciudad de Almería, una de las más conflictivas de España.
• A partir de hoy, tendrán que desplazar los detenidos a Almería, situada a más de 22 kilómetros, lo que repercute en la vigilancia, con una patrulla menos.
2 de julio de 2025. JUCIL, asociación mayoritaria en la Guardia Civil, considera inaceptable que la Guardia Civil en Roquetas de Mar no cuente con calabozos para la custodia de los detenidos. Esta localidad —la segunda más poblada de la provincia— es además uno de los puestos más conflictivos del país, con más de 1.000 detenciones y más de 10.000 diligencias anuales.
Hasta hoy, utilizaban las dependencias de la Policía Local para albergar a los detenidos. Sin embargo, esta posibilidad ha quedado suspendida, lo que obliga ahora a trasladar a los arrestados a la Comandancia de Almería, situada a más de 22 kilómetros, con un tiempo estimado de 30 minutos por trayecto.
Esta situación genera un grave perjuicio operativo: patrullas enteras quedan relegadas a funciones de traslado en lugar de prestar servicio directo a la ciudadanía, con el consiguiente impacto en la seguridad. Además, implica riesgos adicionales como intentos de fuga, accidentes durante el transporte y complicaciones jurídicas al cambiar de partido judicial constantemente.
La época estival agrava el problema. En verano, la población de Roquetas de Mar se triplica y las fuerzas de seguridad ven reducida su plantilla por el periodo vacacional, justo cuando más se requiere su presencia en las calles.
Rafa Maldonado, secretario de JUCIL en Almería, destaca que “el verdadero problema no es la pérdida puntual del uso de los calabozos municipales, sino la falta histórica de un área de detención propia en el cuartel de Roquetas de Mar, algo que incumple lo establecido en la Instrucción 11/2015 de la Secretaría de Estado de Seguridad. Esta carencia demuestra el abandono institucional que sufre una unidad tan crucial para la seguridad ciudadana”.
JUCIL exige a la Dirección General de la Guardia Civil y a la Comandancia de Almería que actúen con urgencia, dotando a Roquetas de Mar de un centro de detención propio y adecuado. Solo así se podrá garantizar un servicio eficiente, seguro y digno tanto para los agentes como para los ciudadanos.
Radiografía nacional
A nivel nacional JUCIL acaba de presentar una solicitud formal ante la Dirección General de la Guardia Civil para conocer el estado actual de los edificios y acuartelamientos en los que los agentes desarrollan su labor en todo el territorio nacional, tras detectar el grave deterioro en el que se encuentran muchos de ellos. La organización advierte en su escrito de una preocupante falta de inversión en el mantenimiento preventivo y correctivo de estas infraestructuras, lo que compromete tanto la seguridad de los efectivos como la calidad del servicio que prestan a la ciudadanía.