Durante el encuentro, Ernesto Vilariño, Secretario General de JUCIL, ha reclamado atención prioritaria a una serie de demandas históricas que afectan directamente a la dignidad profesional, la eficacia del servicio y los derechos laborales de los agentes.

24 de marzo de 2025 – JUCIL ha solicitado formalmente a la Directora General de la Guardia Civil, Mercedes González, que impulse la equiparación salarial con el resto de fuerzas y cuerpos de seguridad, aplicando el principio de “a igual trabajo, igual salario”.

Durante la reunión mantenida, Ernesto Vilariño, Secretario General de JUCIL, ha reclamado atención prioritaria a una serie de demandas históricas que afectan directamente a la dignidad profesional, la eficacia del servicio y los derechos laborales de los agentes. La discriminación salarial y organizativa que sufren los guardias civiles respecto a otros cuerpos policiales y funcionarios públicos sigue sin resolverse.

“Se lleva demasiado tiempo ignorando a una institución clave para el bienestar del país. La equiparación salarial con otras fuerzas y cuerpos de seguridad del estado es indignante y las diferencias siguen creciendo. Esto no puede seguir así; es una injusticia para quienes formamos parte de este cuerpo”, denunciaba Vilariño.

Para JUCIL, el desbloqueo de la subida salarial debería ser una prioridad en el Ministerio del Interior. “El Ministerio presume de tener un cuerpo digno de estudio por Europa en la lucha contra el narcotráfico pero al que maltrata tras varios años de bloqueo en la mejora de las condiciones, lo que redunda en diferencias salariales, organizativas y laborales entre sus diferentes cuerpos policiales sin razón alguna”, denunciaba Vilariño.

Desde JUCIL advierten que la paciencia se ha agotado y exigen una equiparación salarial real y completa con las policías autonómicas, como los Mossos d’Esquadra y la Ertzaintza, en todos los conceptos retributivos.

Además, la asociación reclama la devolución inmediata del recorte salarial del 5% aplicado en 2011, especialmente en las pagas extraordinarias, que se ha sumado a la pérdida de poder adquisitivo debido al constante aumento del IPC.

JUCIL ha recordado en su reunión con la Directora General que las condiciones laborales de los guardias civiles siguen siendo desfavorables. JUCIL denuncia que el cuerpo sigue sin disponer del turno 6×6 (seis días de trabajo y seis de descanso), una medida clave para eliminar los “dobletes”, que afectan gravemente a la salud de los agentes.

Otra de las discriminaciones que sufre la Guardia Civil es la falta de reconocimiento como profesión de riesgo, a pesar del aumento de agresiones. En 2024 se registraron 1.404 agresiones a guardias civiles, un 34% más que en los últimos dos años. Este reconocimiento permitiría acceder a mejoras en la jubilación, coeficientes reductores y compensaciones por penosidad y peligrosidad.

En esta línea, JUCIL también reivindica una jubilación digna y el acceso voluntario a la reserva sin penalizaciones económicas.

“Arrastramos un histórico de deficiencias incomprensible. El maltrato va desde la insuficiente cifra de efectivos y las escasas plazas de oferta de empleo público, hasta el sometimiento al doble código penal, por lo hablar de que hemos sido moneda de cambio político, perdiendo competencias que tenemos asignadas por ley en algunas comunidades”, finalizaba Vilariño.