La Dirección General reconoce, como señaló JUCIL, riesgos en algunos de los nuevos vehículos por el difícil acceso al extintor
La asociación profesional remitió una propuesta al Consejo de la Guardia Civil para que se cambiara la ubicación de los sistemas de extinción de incendios instalados en los Jeep Renegade por las dificultades de llegar a ellos cuando el maletero del coche se encuentra lleno de material
JUCIL pidió además, y así lo recoge ahora el mando operativo, que se valore cuáles son los materiales necesarios de transportar en función del servicio que se lleve a cabo y no que el vehículo no tenga más capacidad de almacenamiento porque está todo el espacio ocupado
La asociación profesional Justicia para la Guardia Civil presentó una propuesta, para su debate y en el Consejo de la Guardia Civil, en la que solicitaba que se cambiara la ubicación de los extintores con los que vienen equipados los nuevos vehículos Jeep Renegade dadas las dificultades de acceso a estos elementos cuando el coche lleva el maletero repleto de otros artículos necesarios para el servicio de los guardias civiles. JUCIL añadía que este modelo de vehículo tiene un maletero pequeño, con el extintor situado en el fondo de este, y de difícil utilización en un caso de incendio si hay que vaciar todo el compartimento para llegar hasta él.
JUCIL planteó esta iniciativa con el objetivo de garantizar tanto la seguridad de los guardias civiles durante su servicio en estos vehículos como la eficacia de las operaciones en las que puedan participar. En este mismo sentido, también se había solicitado que, en cada ocasión, aquellos elementos que vayan a ser útiles para el servicio que se lleve a cabo ocupen el maletero, minimizando así cualquier riesgo derivado de la dificultad de acceso al mismo.
La respuesta de la Dirección General a las peticiones de JUCIL
La respuesta que la Dirección General ha hecho llegar a JUCIL sobre esta propuesta y las posibilidades de mejorar y reducir estos riesgos ha sido la siguiente:
“Los vehículos de la marca Jeep, del modelo ‘Renegade’, ya vienen equipados por la empresa de origen, con el kit de material colectivo para el servicio, que ocupa la práctica totalidad del maletero, pero el equipamiento policial lo constituye todo aquel utensilio que necesita el personal de la Guardia Civil para desempeñar sus labores de manera óptima, incluyendo su dotación individual y el material específico” explica la Dirección General en la respuesta remitida a JUCIL.
La misma respuesta añade posteriormente que “El vehículo está equipado con un extintor, anclado en el suelo del maletero, con dificultades de acceso cuando éste está lleno y, por este motivo y en virtud de todo lo anterior se recomiendan las siguientes medidas preventivas para el uso de estos turismos por parte de los guardias civiles:
- Reubicar el extintor, convenientemente fijado, en un lugar fácilmente accesible que no quede cubierto.
- Establecer medidas organizativas, en cuanto al tipo de servicio a desarrollar y el personal específico para realizarlo, a fin de que el equipamiento colectivo se emplee únicamente en circunstancias excepcionales, toda vez que para descargar y, sobre todo, volver a guardar el material, aumenta el tiempo de exposición del personal al riesgo de atropello, para lo cual se debe extremar en ese momento la vigilancia del tráfico en la vía.
- Evitar que el personal deje cualquier tipo de objeto suelto en el interior del habitáculo del vehículo, por el riesgo de proyección en caso de frenazo o accidente.
- Estudiar la viabilidad de reducir el volumen del equipamiento que debe llevar el vehículo, para ubicar en el maletero aquellos elementos del equipo individual que sean necesarios.
- Informar al personal de las unidades adjudicatarias de este tipo de vehículos del contenido de estas medidas.
JUCIL expresa su satisfacción por el hecho de que se hayan recogido sus aportaciones para la mejora de las condiciones laborales en las que llevan a cabo sus trabajos los guardias civiles destinados en estos o en otros vehículos y vigilará para que se reduzcan los riesgos a los que están sometidos en el ejercicio de su labor profesional.
